Dolor.

Cada noche dudo de mi vida, de mis pasos, de mis decisiones, de mi forma de actuar y incluso muchas veces también de mi. Sé que en el camino me he ido perdiendo, pero también me he vuelto a encontrar muchas veces, reafirmando quien soy y como soy. 


Hoy, igual que mañana, dudo de si hago bien, porque he tenido tantas veces las ganas de volver al pasado, ganas de querer cosas que sé que me volverían a hacer daño, sé que las quiero, por mucho que no pueda tenerlas, es querer y no poder porque no pueden estar conmigo. Durante tanto tiempo pensé que no me haría daño, que era lo mejor que podía tener en la vida, que era un regalo, pensaba que era el mejor regalo que jamás podría tener pero como todo, se fue y en ese momento me di cuenta de que dolía y si volvía a tenerlo me dolería tanto que sería incapaz de ser feliz. Ahora, es diferente porque ya no es la misma situación, él ya no es el mismo pero... tampoco puedo tenerte y, duele.

Continuar.

Ahora todo se queda atrás, por mucho que duela, por muchas lágrimas, es hora de dejar que el tiempo haga con mi vida lo que desee y que todo aquello que sólo me atormenta, se quede ahí, distanciado. Pero también tengo que reconocer, que cuando ello quiera que vuelva, volveré.